Muere
COMPAY SEGUNDO
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Texto
y Fotos: Grupo Reforma/AFP
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El
cantante y compositor cubano Compay Segundo, de 95 años de
edad, falleció la madrugada de este lunes en su domicilio
de La Habana rodeado de sus amigos y familiares, informaron portavoces
oficiales.
Compay Segundo,
cuyo verdadero nombre era Francisco Repilado, murió debido
a un "desajuste metabólico agudo con insuficiencia renal",
de acuerdo a un informe médico reportado por la agencia estatal
Prensa Latina.
Las emisoras
de televisión iniciaron sus transmisiones con videos del
popular músico mientras daban la noticia de su muerte a la
población, que despertó sorprendida ante la novedad
del fallecimiento del artista, pese a que se conocía su delicado
estado desde hace unas semanas.
Hasta
el momento no hubo reacciones en Cuba a la muerte de Compay Segundo,
quien en vida recibió las máximas distinciones que
concede el Estado a quienes se destacan por su actividad cultural.
"Su estado
de salud sufría un deterioro sucesivo en los últimos
meses debido al desajuste metabólico agudo con insuficiencia
renal, que desencadenó un cuadro severo, que al impedir eliminar
desechos tóxicos fue contaminando su sangre", explica
el informe médico que da cuenta de los motivos de su muerte.
El artista era
considerado un ícono en la música cubana desde hace
varias décadas, pero su fama recién llegó fuera
de fronteras en el ocaso de su vida, cuando en 1997 graba el disco
"Buena Vista Social Club", producido por el estadounidense
Ry Cooder, y gana un Premio Grammy en 1998.
Con
el mismo título de su disco, el cineasta alemán Win
Wenders filma luego un documental que promueve a Compay Segundo
a los primeros planos del estrellato, en momentos que celebraba
sus 89 años de vida.
Considerado
en Cuba como el artista que devolvió al son a un lugar de
privilegio entre la música bailable del Caribe, Compay Segundo
se transformó en un símbolo de "cubanía"
y sus canciones se escuchaban en gran parte de los actos oficiales,
al ser asumido por el gobierno revolucionario como uno de sus célebres
representantes.
Afable y de
trato sencillo, el veterano compositor conoció el privilegio
de tocar en los principales escenarios del mundo, como el Olympia
de París y el Carnegie Hall de Nueva York, entre otros.
Su
figura era fácilmente reconocible bajo un tradicional sombrero
Panamá blanco, que nunca dejaba de usar, y que ofreció
varias veces en subastas en La Habana para recaudar fondos para
causas benéficas. El año pasado, un empresario español
llegó a pagar 16 mil dólares por uno de sus sombreros.
Creador de melodías
como "Chan Chan" y "Macusa", entre un centenar
de composiciones, los sones entonados por este artista son requeridos
a diario a los grupos orquestales que tocan en los hoteles de la
isla, por los miles de turistas que ven reflejado en la música
de Compay Segundo el son característico de Cuba.
Nacido en 1907
en Siboney, un pueblo del extremo oriental de la isla, el fallecido
compositor vivió siempre acompañado por la música,
pero para ganarse la vida trabajó como barbero y elaborando
cigarros puros, al tiempo que integraba diversas orquestas y agrupaciones
como guitarrista y clarinetista.
Su
última presentación en público fue en febrero
pasado, en el Auditorio Nacional de México, donde cautivó
a los espectadores con su cancionero y su permanente humor.
Además
de sus más de 100 canciones, Compay Segundo legó a
las nuevas generaciones de músicos un nuevo instrumento diseñado
por él, al que llamó "el armónico",
una mezcla de guitarra y tres, de cuatro cuerdas, con el que se
acompañaba para entonar sus reconocidas melodías.
"Su muerte
deja un vacío irrecuperable en la música cubana, en
la que permanecerán para siempre piezas como Macusa y Chan
Chan, que han dado la vuelta al mundo. También quedará
la imagen de su permanente sonrisa", señala la nota
póstuma divulgada en la prensa oficial de Cuba.
Julio
2003
Importante:
Se puede bajar y usar las fotos libremente
siempre cuando se cita AmericaSalsa.com
como fuente
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