El sábado 13 de Noviembre se llevo a cabo en la ciudad de Paraná (Entre Ríos), organizado por la escuela de salsa local “La Azúcar” que es dirigida por sus profesores Analía González y Alejandro Altamirano, en un lugar excelente para este tipo de eventos (muy lindo salón) el primer congreso de esta ciudad, con una duración de 11 horas, desde las 9 AM hasta las 8 PM, que consto con talleres de afro, mambo, rock and roll, y bailes social-populares cubanos (danzón, son, cha-cha-cha, rumba, rueda de casino y pilón), todos dictados por profesores que actualmente residen en Buenos Aires.
Organización:
La organización fue impecable, la hora de inicio de los talleres fue muy puntual, cosa muy difícil de respetar teniendo en cuenta que siempre hay inconvenientes; el sistema de inscripción, y la atención fue muy buena, siempre estaban los dos profesores organizadores en el escritorio para explicarte o guiarte respecto a los talleres y hacerles respetar a los profesores de los mismos sus horarios de entrada y salida.
Los Talleres:
El primero de estos estuvo a cargo de Cecilia Benavidez, quien empezó la mañana con un grupo muy concurrido al que se encargo de agotar físicamente con una muy buena enseñanza de lo que son los ritmos afro-cubanos y afro-latinos. Con una parte de historia, mitología afro cubana y afro brasilera y otra de muchísimos movimientos sumada a su muy buena onda se paso una hora y media (duración promedio de todos los talleres), que a la gente le resulto increíble.
El segundo nivel de este taller básicamente tuvo la misma estructura, con menos explicación y pasos básicos, pero mucho mas exigente en la parte física ya que la dificultad de avanzar de nivel no viene sola, pero cuanto mas intensa se ponía la clase, más ganas de seguir te daban.
Luego siguieron Adrián Laíno y Gabriela Cortes (también de Bs.As.), quienes se encargaron de explicar el estilo de salsa-mambo o baile “en 2”, con todos los ingredientes necesarios, como ser el estilo del baile, shines (pasos sueltos), y por supuesto comprensión musical y baile de parejas. Mucha dedicación en el trabajo de cuerpo y brazos, sobretodo para las chicas que eran mayoría (al igual que en casi todas las clases), y mas hincapié en la parte de shines y parejas ya en el nivel 2.
También dictaron un muy entretenido taller de Rock’&’Roll, divertido y practico, seguido de una demostración al final muy linda e interesante para todos los presentes.
Taller numero tres para el cubano residente en nuestro país desde hace 8 años aproximadamente Jorge Rodríguez, quien impartió muchísimos conocimientos no solo de baile, sino también culturales, haciendo una recorrida por una gran cantidad de ritmos populares cubanos, como el danzón, la rumba, el cha-cha-cha, y los orígenes del casino y su tan popular rueda. Al igual que los profesores de los talleres anteriores, comenzando desde el básico, hasta terminar con figuras mas complicadas ya en el segundo nivel.
LOS PROFESORES:
Adrián Laíno y Gabriela Cortés
- “Cuéntennos su experiencia en este viaje”:
“ Es la primera vez que venimos y la verdad que nos atendieron muy bien, queremos repetirlo. En todos lados nos atendieron bien. La gente es muy cálida, es lindo venir a un lugar adonde te tratan bien desde la persona que te abre las puertas de un lugar hasta el alumno que viene a tomar una clase, es un placer. Nos asombro ver como la gente sabía de esto, como se movieron. Le pusieron fuerza y agarraron el ritmo enseguida, se engancharon y les gusto mucho. Es gente muy abierta, es fácil dar clases cuando ves que la otra persona recibe lo que le estas dando, a uno le da mucha satisfacción, nos hizo sentir muy bien, no importa si dormimos, si no dormimos, el hecho que la gente venga y te abrace y te diga que les gustó la clase, es bárbaro”.
Cecilia Benavídez
- “Como fue tu experiencia”:
La experiencia fue buenísima, yo hablaba con los chicos que sentía mucho respeto, una cosa de compromiso en el trabajo, de querer saber... el trabajo que además hago dentro de esto de lo afro – latinoamericano, exige no sólo la exigencia física sino también lo que estas poniendo, uno está hablando de un arquetipo, de un personaje, los pibes se meten, están... quieren saber, no dan más, están muertos y ponen fuerza... y eso está muy bueno viste... No quiero hacer una jerarquización de Bs. As. O el interior, pero a veces como Bs. As. está tan lleno de cosas y ligado a cosas, como que a veces viste... van, vienen, pululan, no le dan importancia, y acá no, hay como un interés, como una sed, cuando uno siente sed de aprender cosas nuevas, y eso lo sentí en el taller. Mas allá del afecto, que uno termina la clase y la gente se acerca y te agradece, que es buenísimo, me parece que sentir esto de la gente, esta sed y estas ganas de aprender a uno lo hace sentir bien. No importa si es mucho o poco lo que puedo dar, es lo que puedo dar. Entonces cuando la gente devuelve está buenísimo. Y la gente de la organización también, desde el horario que hay un mínimo atraso lógico en cualquier actividad, la atención, estar preocupado. Desde un buen lugar físico, el sonido, la luz, el piso, que parecen obviedades pero que eso también ayuda y tiene que ver con un respeto por tu trabajo y me parece súper importante porque no está en todos los lugares, porque no lo hace todo el mundo, y porque no pasa sólo por lo económico, no importa si un curso puede ser mas barato o mas caro, pero donde se respetan estas cosas me parece como fundamental, y eso traspasa el límite de lo económico, por lo menos para mi.
Me encantó, me encanta que la gente se quede con algo, con una emoción, con una sensación, con un dolor de piernas (risas).
La experiencia fue buenísima y vemos esta noche en el escenario que es otra cosa”.
Jorge Rodríguez:
- “Como fue tu experiencia”:
Mi experiencia la califico como muy buena porque pude lograr uno de mis objetivos que me propongo en todas mis clases que es el ida y vuelta con los alumnos. Si bien yo estoy del lado del que imparto lo que sé, me gusta que eso se produzca en un marco en donde los que están del lado de los alumnos sientan que en un punto somos un grupo y que yo soy uno mas que sencillamente esta de frente. Entonces desde ahí pienso que la comunicación fue muy buena y además el clima fue bastante divertido, alegre, ameno, y yo lo califico como un éxito. Me sentí muy bien. Aparte los chicos (Alejandro y Analía) me atendieron muy bien, me han tratado muy bien y estoy contento, la verdad es una linda experiencia”.
Alejandro Altamirano y Analía González
- “¿Cómo fue la experiencia de organizar su primer taller?”:
“Venimos con la idea desde hace un año de traer algo acá. Porque todavía en Entre Ríos la movida salsera no se manifiesta. Hay gente que le gusta mucho esta música pero al varón le cuesta mucho entrar en la clase, engancharse, le da vergüenza, y eso lleva mucho tiempo, trabajo, esfuerzo de tratar de convencer a la gente que esto es bueno, que esto es lindo, y que además de la música, de escucharla como a ellos les gusta, también es bueno bailarla. Y bueno, lo logramos poco a poco, y la cuestión es no claudicar y que se arme un lindo grupo de gente salsera, una comunidad salsera interesante. Porque acá cruzan, Santa fe, Rosario, hay una movida un poco más interesante”.
- “¿Qué aprendieron con este primer taller?”:
“Uno de nuestros objetivos era mostrar lo que se hace en Bs. As. El nivel de los profesores fue muy bueno, excelente; y también era el objetivo mostrar lo que pasa afuera. Acá por ejemplo hay que dar ½ hora de merengue antes de dar salsa, porque la gente relaciona el merengue más con el cuarteto y entran por ese lado”.
- “¿Y cómo sienten que respondió la gente?”:
“Hubo mucha expectativa, muchísimos informes, pero creo que no se animaron. La expectativa que teníamos era de mucha más gente. De todas maneras estamos contentos porque hay gente que se vino desde Villaguay, Nogoyá, Valle María, del interior de la provincia, que es importante, que han sido nuestros alumnos y han apostado a esto. Pero hay que seguir, y creo que para la próxima tal vez sería mejor que la oferta de ritmos sea más específica. Por ahí le gente al haber tanto abanico de posibilidades, tal vez no captó qué era eso. Entonces tal vez el próximo seminario sea de un ritmo en particular”.
- “¿Cuál es el sentimiento que les queda ahora que terminó?”:
“La verdad nos encantó que hayan venido los profesores, los conocemos de Bs. As, cuando vamos tomamos clases particulares con ellos y me emocionó muchísimo por ejemplo, cuando Cecilia hizo su primer clase acá, en nuestro gimnasio. Verla a ella dando la clase con toda su energía y que nuestros alumnos pusieran sentir lo que nosotros sentimos cuando tomamos sus clases. Y verle las caras de regocijo a la gente por los profesores que trajimos, por su onda”.
En General:
La organización fue bastante buena, la diversidad de estilos de las clases variada y muy interesante, la gente que asistió respondió muy bien, y los profesores se llevaron el premio, por su buena onda, por sus conocimientos, por sus niveles de enseñaza y finalmente por su dedicación hacia los presentes, en resumen un muy buen congreso.
La Fiesta De Cierre:
A la noche frente a un bar, en la calle (previamente cortada, por supuesto), con la participación de todos los profesores, ya en calidad de bailarines, con presentaciones que por demás esta destacar, participaron también los organizadores con un par de coreos muy bien trabajadas, y una gran aceptación del publico, que se sumo a la fiesta luego, la que lamentablemente se suspendió por lluvia (diluvio mejor dicho), pero que gusto muchísimo y posiblemente anime a mas gente a sumarse a esta familia que es el baile de la salsa.
 Noviembre
2004
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